PARQUE NATURAL DE LAS DUNAS DE CORRUBEDO

  En el municipio de Santa Uxía de Ribeira, entre las rías de Arousa y la de Muros y Noia (extremo occidental de la península de Barbanza), provincia de A Coruña, se encuentra el Parque Natural de las Dunas de Corrubedo. Un espacio natural protegido de 1.000 hectáreas de superficie donde concurren zonas dunares, playas paradisíacas, lagunas de agua dulce y de agua salada, marismas  y una gran variedad de fauna entre los que destacan: cercetas, zarapitos, patos-cuchara, correlimos, chorlitejos asi como y flora de la costa gallega, juncos y carrizos principalmente. 

  Los primeros asentamientos humanos dejaron sus huellas y restos por esta zona de Galicia representando un valor añadido a su importancia patrimonial.
 El dólmen de Axeitos, uno de los símbolos de Megalitismo de Galicia se encuentra a muy pocos kilómetros del parque. Se trata de un monumento funerario con más de 4000 años de antigüedad, siendo uno de los dólmenes mejor conservados de toda la península ibérica. 
Ocho grandes lajas de granito enclavadas en la tierra conforman una planta poligonal sobre la que se apoya otra losa horizontal de gran tamaño. También podemos observar cerca de este parque el petroglifo de la Pedra das Cabras y restos de la cultura castreña, como el Facho o Tahume.

  El principal atractivo del Parque Natural es sin duda la duna móvil, única en Galicia es tan espectacular que aquí se han rodado escenas de películas ambientadas en el desierto. Con más de 1 km de largo, unos 250 m de ancho y unos 20 m de altura, la duna móvil de Corrubedo se impone desde la distancia, blanca como una reina de arena, en este parque natural que es el más visitado de Galicia, con casi 300.000 personas al año. Hay una amplia red de caminos para no invadir la zona dunar y pasarelas que enseñan el lugar del modo más completo.


  El cordón dunar propició el represamiento apreciable del agua, formándose la laguna de Carregal, que quedó comunicada con el mar por un conjunto de canales. La zona se encharca y drena en función del régimen intermareal, constituyendo una marisma que también es alimentada por varios regatos que bajan de la sierra de Barbanza. De alto valor ornitológico destacan de entre los patos que anidan en esta laguna, el alcaraván, la espátula y el aguilucho lagunero, además de muchas especies de aves de paso; entre los mamíferos, la nutria. 

Playa de O Vilar

La laguna de Vixán, originada mediante un proceso semejante, se comunica con el mar sólo en los períodos equinocciales. El carácter dulceacuícola de esta laguna, le proporciona unas características ecológicas sensiblemente distintas a la anterior. La visita al Centro de Interpretación del Ecosistema Litoral del Parque Natural de Corrubedo justifican por si solos una visita.

 

  La playa del Parque Natural es en realidad un grupo de cinco playas consecutivas, siendo la más larga la playa de A Lagoa con cerca de tres kilómetros de largo y una anchura de 30 metros. También podemos disfrutar en las cercanías de la playa de O Vilar, de 2200 metros, que en verano se encuentra más concurrida que las anteriores y posee mayor número de servicios.

Las tres rutas principales de este parque son:

Camino del agua: recorrido 3km – 1,5h. Llega hasta la laguna de agua dulce de Vixán (alimentada por el arroyo do Vilar) y los restos de un castro en Porto Baixo.

Camino del mar: recorrido 6km – 3h. Nos lleva a la laguna salobre de Carrexal donde vierte sus aguas el río Longo y los arroyos Sanchanás y Sirves.

Camino del viento: recorrido 5km – 2,5h. Se inicia desde la caseta de información del parking de Olveira La playa do Vilar (la zona no nudista) dispone de aparcamiento, restaurante, mesas para merendar, baños, duchas y está vigilada por socorristas.es una ruta circular que nos lleva a la gran duna móvil.

  Es interesante subir al Mirador da Pedra da Rá (el Mirador de Piedra de la Rana), desde donde se puede contemplar a vista de pájaro toda la extensión del Parque Natural de las Dunas de Corrubedo, los pueblos de la costa y, si el día está despejado, la ría de Arousa
. Si tienes oportunidad, puedes visitar el Faro de Corrubedo, construido en el año 1.853 en un enclave privilegiado, donde el mar rompe con toda su bravura y desde el que se pueden divisar las luces de los faros de Finisterre y de las Islas Cíes.

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